lunes, 13 de julio de 2009

¿DE QUIÉN ES LA CULPA?


La mayoría de los ciudadanos vemos con escepticismo los procesos electorales intermedios a Diputados Federales.

Es una “tradición” que las votaciones intermedias sean las más bajas (58% en 2003 y 60% en el 2009) y, por ende, el abstencionismo mas alto, ahora ayudado de facto por el VOTO BLANCO o VOTO NULO que, en otro tipo de procesos como cuando se elige a un Presidente de la República, Gobernador o un Presidente Municipal.

En una palabra te diagnostico la razón de ello: DESCONOCIMIENTO.

Y de ahí en adelante vienen todo tipo de expresiones que reforzarían, precisarían, complicarían, descalificarían, involucrarían… esta aseveración.

Para tratar de reforzar, según las encuestas que reviso, más del 80% de los ciudadanos no sabe precisar las labores de un Diputado.

Esto complica el proceso y la gente tiende a descalificar a los “aún no electos” Diputados a la siguiente Legislatura – aún cuando no se sepa como estaría conformada- porque no se involucran en la política electoral. Se autodenominan “a-políticos”, erróneamente. Ya lo hemos dicho.

1.- Hay quienes culpan al GOBIERNO como responsable de no cumplir con la obligación de educar a la gente para que sepa que función tiene “mi representante”. Y tienen razón.

Lo pongo así, entre comillas porque, si algo se ha dicho- y dicho bien… y mal- es que no es mi representante porque yo no lo elegí. Creo que no se refieren sólo al yo no voté por él, sino desde antes, cuando aún no llegaba a ocupar el rimbombante nombre de “Pre-candidato”.

Si de algo se habían sentido orgullosos muchos de los impulsores de la democracia es que se había logrado que, en su propio distrito, los que ahí viven, pudieran optar por un ciudadano nacido, crecido, desarrollado e involucrado en la misma región. Y, ahora ¿Qué pasó?

Pero cuando nos referimos al Diputado electo, que es nuestro Diputado aunque no hayamos votado por él, debe existir un compromiso de su parte.
Y ahí es donde ya no le reconocemos esa expresión de “mi Diputado”.

Pero regresando al DESCONOCIMIENTO…,

2.- Otros se lo acreditan a los PARTIDOS POLÍTICOS ya que para ello cuentan con recursos durante todo el año, todos los años.

Si. Una de las funciones de los partidos políticos es, precisamente, impulsar el desarrollo de una verdadera democracia, de manera permanente. Y la verdad que no generalizo, pero si estoy conciente que no se siente que cumplan con esa responsabilidad. La gente asegura que sólo aparecen cuando vienen las elecciones.

Pero con una Reforma al COFIPE como la reciente ¿Qué posibilidades tienen las nuevas opciones para crecer, si no existe la equidad?

Basta ver, tanto los resultados de la elección como la falta de presencia crítica – pero en serio- de asociaciones e instituciones representativas de la ciudadanía, en la opinión pública local, estatal y nacional. Y todo porque ya existe el riesgo de ser sancionado por opinar sobre un candidato.
¡Vaya libertad de expresión!

3.- El desconocimiento también se le acredita a los propios CANDIDATOS porque ¡No me diga que no le han ofrecido muchas cosas por su voto! Que no son, precisamente, facultades de un Diputado Federal.

Ni pavimentación, ni agua, ni luz, ni guarniciones, ni banquetas, ni casas, ni computadoras, ni becas, ni dinero, ni empleo, ni… bla bla bla pueden ofrecer de MANERA DIRECTA los Diputados, pues esas funciones rebasan en muchos casos, inclusive, al propio Presidente de la Pepública.

4.- Pero ¿Cuántos aceptamos que es NUESTRA RESPONSABILIDAD que no sabemos a que se dedica un Diputado? ¿Qué excusa me darías?
Te voy a dar respuestas. Sólo como ejemplo enlisto:
a) Búscalo en tu libro de Civismo, cuando eras un secundarista,
b) Revisa la Constitución, que pudiste leer desde primaria,
c) Entra en Internet, y repasa la ley orgánica del Congreso,
d) Lee los artículos y escucha las columnas editoriales en los medios masivos de información cuando se acercan los procesos electorales, y
e) Acepta asistir al informe de labores de tu representante.

A final de cuentas nadie va a hacer lo que no se le exija. Si te ofreció algo, lo tiene que cumplir. ¿Recuerdas que te ofreció? ¿No? ¡Que pena!

Pero aún es tiempo. Ya empezó la carrera del 2010. Si participas, te preparas y te involucras desde ahora, las cosas irán mejor, aunque sea en ese pequeñísimo avance en la Democracia que habíamos logrado.

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